“Toda esta trama forma parte de la mafia que hay en la política”, ha manifestado, a la vez que se considera víctima de un "linchamiento", además de que no ve "motivos para retirar la candidatura".

Baeza se ha pronunciado así en una rueda de prensa junto al secretario general de Podemos en Castilla y León, Pablo Fernández, y ante numerosos medios de comunicación nacionales, sobre todo informadores de distintas televisiones.

Fernández ha dado "todo el respaldo y apoyo" de la organización a la candidata de Podemos, y ha dicho que ella es “un ejemplo paradigmática de cómo se reinserta una persona en la sociedad". Ha explicado que fue informado por ella acerca de su pasado tras ganar las primarias y ha subrayado que con este caso “se está poniendo a prueba la firmeza del estado democrático”.

“A Pilar la ampara la Constitución y el Código Civil para el libre ejercicio de sus derechos civiles, ha cumplido con la justicia y la sociedad, y su vida es normal regentando un negocio” desde hace muchos años en capital abulense, ha manifestado el responsable regional de Podemos.

Hace 34 años
Por su parte, tras lamentar la publicación de la sentencia de un hecho ocurrido en 1985 en Leganés (Madrid), cuando tenía 23 años, Baeza ha lamentado que se ha intentando hacerla “el máximo daño posible” por motivos que desconoce.

“En la vida -ha dicho- uno tiene que afrontar circunstancias no siempre buscadas ni merecidas, aún así entonces afronté el problema como pude o supe. La joven ingenua y sin experiencia que yo era hace más de 34 años nada tiene que ver con la persona en que me he convertido, habiendo dado muestras de mi integridad y mi lucha contras las situaciones que yo considero injustas a lo largo de los años con una trayectoria personal sin reproche alguno”.

Y ha recordado que hace años que terminó su condena: “Hace muchísimo tiempo cumplí con la justicia en todos y cada uno de sus términos, habiendo cerrado ese capítulo de mi vida sin ninguna deuda con la sociedad”, en lo que es un capítulo de su vida que “se pretende utilizar, probablemente con fines políticos, de revanchismo y en un evidente afán por desacreditarme”.

Por su parte, Baeza ha explicado que entrada en la política pretende "contribuir al progreso de Ávila y su desarrollo" y sin importarle que se conociera su pasado, señalando que ella dio a conocer su pasado cuando ganó las primarias y destacando que han sabido valorarla "como persona". También ha querido resaltar que ella concurrió a las primarias cumpliendo el código ético de Podemos.

Coacciones
La candidata ha explicado que tras darse a conocer que ella sería la candidata recibió "coacciones externas para que abandonase" por parte de personas que han intentado chantajearle "con la publicación de la noticia", lo que le ha llevado a tomar las "medidas oportunas” con denuncias en los juzgados.

"Yo no acepto chantajes, ni me vendo, pues no es la primera vez que se me intenta callar utilizando mi pasado como amenaza", ha afirmado, para después señalar que "la democracia no es libertinaje, es decir, no todo vale".

"La libertad de cada uno de nosotros termina donde empieza la de los demás, por lo que no tiene lugar el acoso y derribo que sufro en estos momentos", ha expresado.

Ante su situación, se ha preguntado si “realmente merece la pena todo esto”, para contestarse que sí, “porque sólo con actitud de cambio se puede, al menos intentar cambiar las cosas”.

“Hoy, aún, me guían las sabias palabras de mi querido padre cuando sucedieron los terribles hechos, al que echo de menos tras su fallecimiento: la capacidad de las personas está en haberse adaptar a las circunstancias que le rodean”.

Llamamiento
Ante la situación de linchamiento por la que ella atraviesa, ha llamado a "colectivos y asociaciones feministas", porque "esto no es más que un linchamiento" hacia su persona y "posiblemente como mujer".

Por otra parte, Baeza ha informado que en su momento no denunció la violación que sufrió, y que fue el hecho que desencadenó que su novio y un amigo matasen al presunto autor del hecho, si bien no ha detallado el motivo por el que sólo cumplió siete de los 30 años a los que fue condenada, ya que ha señalado que no quería responder a asuntos de esa época.