Este partido dice haber recibido quejas de vecinos y comerciantes, porque “hace tiempo se incumple la ordenanza municipal”, ya que las personas que llegan a los puestos deben hacerlo a las 8 horas y deben salir a las 15, pero lo hacen a las 5,30 horas, que conlleva “ruido de camiones, voces y alboroto”, por lo que “los vecinos que viven por la zona no pueden seguir durmiendo y descansando de madrugada con las consecuencias lógicas para su salud”.

También afirman que dejan la plaza sobre las 16 horas, lo que deriva en que “exista temor entre comerciantes y vecinos a enfrentamientos y a situaciones tensas entre las personas afectadas por esta actividad, que repercute incluso en las condiciones del personal de limpieza”.

Por otro lado, desde Vox abogan porque los puestos de menor tamaño estén delante de comercios, cafeterías y restaurantes, “con el objetivo de tapar la fachada de esos negocios lo menos posible, y llevar los puestos más grandes al frontal de San Juan, en cuya arquería no hay negocios que se puedan ver perjudicados”.

También destacan que a pesar que el mercado es para que agricultores de Ávila y provincia vendan sus propias verduras, frutas y hortalizas, se observan “casos de venta al por mayor”, por lo que creen que el mercado “ha perdido la finalidad de su cometido, acabando con la tradición con la que se creó y dando cabida a otro tipo de productos y tipos de venta que nada tiene que ver con los agricultores, provocando competencia desleal a negocios que se encuentran en la zona y que deben pagar sus impuestos y tasas para conseguir las respectivas licencias”.

A la vez, aseguran que “los hosteleros de la zona demuestran su malestar por tener que desmontar sus terrazas y no poder volver a montarlas hasta que no terminan de recoger”, ya que “no pueden usar el espacio donde se ubican, lo que les provoca un malestar y un obstáculo para su negocio, y se sienten perjudicados económicamente”.