En la reunión celebrada en la tarde del viernes, donde se acordó reabrir la biblioteca del Palacio de los Serrano, se ha dado el visto bueno al borrador, elaborado “conjuntamente” con la Junta. El siguiente paso es la escritura de constitución y la inscripción en el registro de fundaciones, según ha manifestado su presidente, Pablo Luis Gómez.

El proceso del expediente de regulación de empleo (ERE) de la fundación se da por “terminado”, ya que los despidos llevan fecha del 3 de febrero: 13 de los 24 trabajadores son despedidos, aunque uno de ellos causa baja por jubilación. Se trata del director, Gonzalo Jiménez.

“Me sorprendió la decisión porque contaba con él”, ha dicho el presidente, si bien ha indicado que “estos trenes puede que sólo pasen una vez en la vida”, ya que sus condiciones de prejubilación eran las mismas que a las que se acogieron los empleados de Caja de Ávila se marcharon en otoño de 2011.

El puesto de director “no se cubre” y sus funciones han sido asumidas por tres empleados en una comisión de coordinación.

De las condiciones de los despidos (33 días por año trabajado)”, el presidente ha dicho que son “buenas”, a la vez que ha querido “demostrar y reconocer la labor” de los que han sido despedidos y ha agradecido su “sacrificio”. El plan social acordado supone que si se crea algún puesto de trabajo, serán llamados ellos, como ocurrirá con el puesto de auxiliar para la biblioteca. Gómez ha deseado “un cambio de ciclo para ser capaces de generar puestos de trabajo”.

Imagen
Por otra parte, se ha decidido que la imagen que luzca la fundación a partir de ahora sea similar a la utilizada como cuando era una entidad de ahorro, ya que era “perfecta y actual, con fuerza” se ha considerado no modificarla, teniendo en cuenta que ya no es una marca comercial. Con los mismos colores y logotipo lo único nuevo es anteponer la palabra fundación.

Espacios
Acerca de los espacios que la disponía la obra social de la extinta caja en la provincia, el presidente ha señalado que se gestionarán en colaboración con los ayuntamientos, salvo el Centro de Recreo para Mayores de Arévalo, que pasará a manos del Ayuntamiento de la localidad, que previsiblemente lo dedicará a los jóvenes.