Se trata de Alfonso González Garrido, que ha tomado el relevo de la socialista Noelia Jiménez como anterior edil más joven de la corporación municipal. Este cambio en la persona que debe portar la bandera de la capital abulense en este tipo de actos se produce después de que González garrido tomara posesión como concejal de Ciudadanos el pasado 26 de enero, tras la renuncia presentada por su compañero de formación, José Carlos Álvarez.

De esta manera, el joven edil ha encabezado una comitiva municipal encabezada por el alcalde de la ciudad, José Luis Rivas, y con la ausencia de Rubén Serrano, tras la renuncia como concejal en el último pleno municipal. La corporación ha estado representada por la mayoría de los seis grupos que forman parte del pleno, excepto Trato Ciudadano e Izquierda Unida, como suele ser habitual.

Al final de la comitiva también destacaba el presidente de la Diputación, Jesús Manuel Sánchez-Cabrera, que llevaba de la mano a uno de sus hijos al comienzo de su recorrido.

Terminada la misa, todos ellos han acompañado en procesión la imagen de San Segundo, por unas calles con muchos turistas madrileños, hasta llegar a la ermita de San Segundo. Allí, durante toda la jornada y en ambiente de romería, cientos de abulenses han hecho cola para introducir su pañuelo en el hueco situado en el sepulcro en alabastro para solicitar tres deseos.

La procesión, abierta por los tradicionales gigantes y cabezudos con música de dulzaina, llevaba representación de las cofradías de la ciudad acompañando a la imagen de San Segundo, portada a hombros. La comitiva ha contado con los baies tradicionales del grupo folclórico Urdimbre, que este año cumple sus bodas de plata; y con la Banda de Música de Ávila al final de la procesión.

Los lugares con más público han sido la salida de la Catedral, el Mercado Chico, y la glorieta del puente Adaja, donde los bailarines de Urdimbre han danzadoa a la vez que bailaban el paso del santo.

Homilía del obispo

Este año, la celebración de San Segundo ha coincidido con la conmemoración del Año Santo Jubilar Teresiano de fondo, según ha recordado el obispo de Ávila, Jesús García Burillo, en la homilía que ha tenido lugar en la Catedral.

Ante cientos de fieles, autoridades, el Cabildo Catedralicio y los sacerdotes concelebrantes, el prelado se ha referido a la necesidad de "saber aprovechar la gracia que Dios concede a través de Santa teresa, para caminar hacia la santidad".

En este contexto, su homilía ha hecho referencia a las tres nuevos itinerarios teresianos, que se han unido al ya existente entre Ávila y Alba de Tormes (Salamanca), para "detenerse en tres mojones de la ruta de la santidad en este Año Jubilar Teresiano".

La primera de esas paradas, titulada 'Felices los perseguidos', ha aludido a "tantos mártires contemporáneos" que son perseguidos en Oriente Medio o por "haber luchado por la justicia", en un mundo en el que "la ambición de poder" y los "intereses" juegan en contra.

El segundo de los mojones hacía referencia a 'Los santos de la puerta de al lado', que a su juicio pueden ser "las abuelas o madres", así como aquellos "santos anónimos" entre los que ha citado a "al abuelo o al vecino", en los cuales ha situado, no sólo la transmisión de la fe, sino también la santidad.

Tras señalar que es en "las personas más humildes" en las que se encuentra la santidad, Jesús García Burillo ha realizado la tercera parada, a la que ha llamado 'El Señor nos llama a cada uno', para señalar que la llamada de Dios es "para todos", aunque en ese camino "nadie se salva solo".

"La santidad es el rumbo más bello de la Iglesia", ha argumentado el obispo de Ávila, antes de realizar una nueva alusión al Año Jubilar Teresiano. La trascendencia de la primera doctora de la Iglesia siempre resta protagonismo a San Segundo, considerado el primer obispo de la Diócesis abulense y uno de los siete varones apostólicos.

En este contexto, García Burillo ha señalado que celebrar a San Segundo es "agradecer a Dios la transmisión de la fe cristiana", al mismo tiempo que "estimula a reavivar la alegría de ser cristianos".