Los miembros  de la Remer son radioaficionados, conectados entre sí y con Protección Civil, que proporcionan comunicaciones de emergencias relacionadas con incidencias de importancia; tales como los efectos de terremotos, huracanes, inundaciones, incendios forestales, accidentes tecnológicos y otras de especial interés.

Los ‘remeros’, también conocidos así de forma coloquial, han proporcionado en muchas ocasiones valiosas ayudas a los sistemas existentes de comunicaciones y a las autoridades encargadas de restablecer la normalidad en las zonas afectadas.

En Ávila la red funciona desde 1982, coincidiendo  con la visita que realizó el papa Juan Pablo II a la ciudad con concentraciones multitudinarias en diversos actos. Los miembros de la Remer debutaron prestando colaboración al dispositivo de seguridad establecido estando en continuo contacto con el centro de comunicaciones instalado en el entonces Gobierno Civil, ahora Subdelegación del Gobierno.

Desde entonces, esta Remer ha llevado a cabo numerosas intervenciones previniendo circunstancias de riesgo y facilitando una actuación  operativa rápida, tanto en los servicios públicos de emergencias del Estado como en los autonómicos, provinciales o locales.

Alerta

Uno de los principales cometidos de los radioaficionados abulenses es dar la alerta acerca de incidentes o accidentes al centro de comunicaciones operativas de Protección Civil , así como a los diversos organismos con competencias en la resolución de los citados problemas, ya sea a los ayuntamientos, Guardia Civil, Policía Nacional, Policía Local, Cuerpo de Bomberos o centros sanitarios.

También, por el carácter preventivo de este servicio voluntario, es destacable su actuación cuando se celebran fiestas patronales o pruebas deportivas. En la actualidad, en la provincia hay 51 radioaficionados de la Remer.

La valiosa colaboración de los miembros de la Remer se constata por su actuación en la mayoría de los incendios forestales que se producen cada año en Ávila. Durante esos siniestros, los radioaficionados facilitan las comunicaciones vía radio entre los grupos operativos actuantes en la extinción de los incendios.

En otras ocasiones, como en las fuertes nevadas o las lluvias torrenciales que dan lugar a efectos de naturaleza catastrófica siempre han estado también presentes para prestar auxilio y ayuda. Igual en accidentes de montaña, incendios en viviendas y establecimientos industriales, accidentes de tráfico y en la búsqueda de personas desaparecidas.

A los voluntarios que cumplen periodos de cuatro, 15, 20, 25 y 35 años vinculados a la Remer, la Dirección General de Protección Civil les otorga un diploma, que ahora se les ha remitido.

Este año han sido reconocidos Julián Martínez, de Candeleda, por 35 años de colaboración con la Remer; Ana María Carreras, de Candeleda, por 25 años; Jesús Jiménez, de Arenas de san Pedro, por el período de los 20 años; Alfredo Ramos, de Arenas de San Pedro, por otros 20; Rodrigo Gutiérrez, de Ávila, por 15 años; Jesús Esteban, de Las Navas del Marqués, Alfredo Simón, de El Hoyo de Pinares, en ambos casos por su vinculación desde hace cuatro años.