Con un viento que rondaba los 15 kilómetros por hora y una lluvia moderada que limitaba la visibilidad de los pilotos, las tres avionetas ultraligeras que transportaban a Sus Majestades han aterrizado en el Aeródromo El Salobral, cerca de El Fresno. El primero ha tocado tierra a las 12,42 horas.

El piloto y tesorero del aeroclub Aerotraining, Pedro Domínguez, ha explicado de que se ha adelantado el aterrizaje de las tres avionetas porque temían el “frente frío del noroeste”, que podía “complicar las condiciones” del descenso. “Ya es bastante magia traer muchos regalos desde Oriente”, ha indicado.

Debido a las condiciones meteorológicas, los magos han adelantado su llegada al Valle Amblés,  aunque han cumplido su misión de acercarse a las docenas de niños. Medio millar de personas han acudido al mediodía al aeródromo.

Melchor ha reconocido que las condiciones de vuelo habían sido “malas” y que "no ha sido su mejor vuelo", pero que les encanta venir todos los años gracias los “excelentes pilotos” que les han guiado.

Gaspar secundaba a su compañero, tanto en el obstáculo del clima como en los “magníficos pilotos” de Aerotraining que les han transportado. Ha asegurado sentirse con fuerza para afrontar la Cabalgata y ha tranquilizado a los niños, porque a pesar del mal tiempo, “los camellos están acostumbrados a andar por nieve”.

Por último, el rey Baltasar ha informado de que se han detenido varias veces a repostar desde que iniciaran el largo camino desde Oriente, pero se ha mostrado contento de ver el recibimiento, “con tantos niños”.

Melchor ha llegado en una aparato italiano, Tecnam P92, Gaspar en un storch checoslovaco de ala baja y Baltasar en un CT SW de fabricación alemana "con prestaciones excepcionales", han explicado los expertos.