El número máximo de estudiantes es de 80. Es una forma de “potenciar los cursos internacionales en Ávila”, que desde 2005 acogen en la ciudad a unos 200 alumnos cada año, según Isabel González Bravo, consejera delegada de la empresa con la que la USAL canaliza los cursos.

La iniciativa, que ya se ha puesto en práctica en Salamanca con buen resultado,  permitirá a los estudiantes, en función de sus estudios y titulación, aprovechar para aprender español a la vez que realizan prácticas en una empresa. Será en 2013, sobre todo desde el verano, que es la “época alta”, cuando llegan la mitad de que acuden cada año, sobre todo desde Estados Unidos (como Illinois y Michigan) y China (Shangai).

La llegada de alumnos es “bueno para el entramado empresarial de Ávila” y de cara al futuro aumenta la formación de profesorado de español.

Según la directora de la Escuela de Educación y Turismo, Sonsoles Sánchez-Reyes, la mayor parte de los extranjeros acuden a cursos “con fines específicos”, como los dedicados a aspectos legales y policiales -en convenio con la Escuela de Policía-, medios de comunicación o medicina y salud, aprovechando la cercanía con Madrid, que hace de Ávila un destino “más atractivo”.

Cada año se determinará el número de alumnos, que realizarán prácticas en periodos de 45 horas, divididas en seis módulos semanales de siete horas y media, según el convenio firmado por la consejera delegada de Cursos Internacionales y el presidente de la cámara, José Manuel Izquierdo, quien ha subrayado que “la competitividad pasa por la internacionalización”, y ha aludido a que quienes lleguen a Ávila luego serán “embajadores” de la ciudad.