Muchos usuarios a los que había llegado el mensaje en los últimos días lo recibieron con fastidio, dado que las fechas vacacionales propician la utilización de los servicios bibliotecarios. Y sin mucho pensarlo, achacaron el cierre a los recortes en los servicios públicos, pero se trata de un mensaje de correo basura o spam, anónimo, enviado masivamente, y que anunciaba el cierre de todas las bibliotecas de Castilla y León entre el 22 de diciembre y el 7 de enero.

“Por favor, ignoren el mensaje, ya que la información es falsa”, advierte un cartel en la misma puerta de la biblioteca, en el que se informa que abrirá sus puertas de acuerdo a sus horarios normales y que, evidentemente, cerrará las jornadas festivas.