Imputado en el caso Bankia como consejero que fue de la entidad tras la integración de Caja de Ávila, el presidente de la Diputación ha declarado este lunes en la Audiencia Nacional, donde también ha prestado declaración -ante el titular del Juzgado Central de Instrucción número 4 por la instrucción del magistrado Fernando Andreu por la fusión y salida a Bolsa de la entidad- la exteniente de alcalde del Ayuntamiento de Madrid, Mercedes de la Merced.

González ha dicho que en marzo cuando la empresa auditora Deloitte comunicó, cuando tuvieron que formular las cuentas de 2011, que la situación era de “absoluta normalidad”, y que cuando se nacionalizó y José Ignacio Goirigolzarri sustituyó a Rodrigo Rato como presidente del grupo, aceptó la reformulación de cuentas “por responsabilidad” y por ofrecer un margen de confianza al nuevo presidente.

También ha dicho en su declaración que carece de conocimientos financieros o contables porque su profesión era la de “maestro de Primaria”.

A la salida de la Audiencia, ambos han sido abucheados, seguidos y rodeados por afectados por las participaciones preferentes, lo que ha obligado a la Policía a escoltarlos. Han recibido gritos como “chorizos”, “devuélveme mi dinero” y “al talego”, por un grupo de manifestantes que llevaban pancartas con los lemas ‘banquero capullo, ese dinero no es tuyo’ o ‘banqueros culpables’. ‘¿Dónde están mis ahorros?’, le han dicho a González antes de que, entre insultos y asediado durante varias decenas de metros, haya logrado introducirse en un taxi para marcharse del lugar.

Legalidad de las cuentas
Tanto González como De la Merced, como los ocho consejeros de Bankia que han pasado por la Audiencia Nacional, han defendido la legalidad de los dos balances de  cuentas de 2011, que contenía beneficios de 305 millones de euros pero que arrojó unas pérdidas de 2.979.
Vocales ambos del Banco Financiero y de Ahorros (BFA), matriz de Bankia, y durante hora y media, han explicado que supieron de la situación real de Bankia en mayo, a raíz de la crisis que provocó la salida de Rodrigo Rato como presidente.

De la Merced ha defendido la conversión de las participaciones preferentes del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) en acciones en el proceso de recapitalización de la entidad, y asegurado que ella mismo invirtió más de 80.000 euros en el producto financiero tras ser informada de sus características. “Los beneficios han sido bastantes”, ha manifestado, ya que alegó que aunque ha perdido parte del dinero, en su momento recibió altos intereses.

También ha señalado que la nacionalización de Bankia, era necesaria para garantizar el mantenimiento de la Obra Social de Caja Madrid, entidad a la que ella pertenecía.

Las declaraciones judiciales de los imputados seguirán hasta el 20 de diciembre, cuando acudirá el expresidente de Bankia y exvicepresidente del Gobierno Rodrigo Rato. El viernes 23 de noviembre está llamado el exministro abulense Ángel Acebes.

A los 33 exconsejeros imputados, así como a Bankia y a BFA en calidad de personas jurídicas, se les atribuyen indiciariamente y de forma genérica los delitos de falsificación de cuentas, administración desleal, maquinación para alterar el precio de las cosas y apropiación indebida.

La querella, interpuesta por UPyD y a la que luego se unió el Movimiento 15M, acusa a los exconsejeros de Bankia de administración desleal, apropiación indebida, falsificación de cuentas y maquinación para alterar el precio de las cosas.