Participaron 19 pitarras con sus diferentes variedades de garnacha, rufeta, cabernet o palomina. El jurado calificador, compuesto por cinco personas -cuatro varones y una mujer- los degustaron y tuvieron en cuenta el color, olor y sabor, llegando a la conclusión unánime de su mejora y perfeccionamiento de año en año.

Los trofeos, donados por firmas comerciales locales, se adjudicaron a Tomás Pérez de la Fuente, el primer premio; Pablo Blázquez Jara, el segundo; y en tercera posición, igualados, Eusebio Rodríguez Vega y Miguel Ángel Garrido López.

Al final todos los asistentes pudieron degustar todos los vinos, acompañados por aperitivos y un gran pan ofrecido por una panadería local.