El secretario general de UGT en Ávila, Óscar García Barroso, ha explicado que Ávila tiene “la media de salarios más bajos de la región y es una de las provincias con las pensiones y prestaciones de desempleo más bajas”. Además, ha dicho, “uno de cada tres trabajadores de Ávila gana menos del salario mínimo interprofesional”.

Su petición a la patronal es que se sienten a negociar en el marco de los convenios colectivos, “algunos de ellos aún pendientes”, que acogen a cientos de trabajadores “y llevan congelados mucho tiempo”.

Por su parte, Javier García, secretario general de CCOO en Ávila, ha proclamado la necesidad de que aumenten los salarios en un 3% como medida para no perder más poder adquisitivo. “No sólo entre los trabajadores”, ha señalado, “sino también entre los pensionistas”.

Ha criticado duramente a quienes hablan de crecimiento económico, que no será tal hasta que no haya “un reparto justo de la riqueza”.

No se han olvidado de los parados, sobre todo los jóvenes. Javier García ha indicado que están ahí como consecuencia de “las reformas laborales, sobre todo la de 2012”.

Ha reprochado que la CEOE (Confederación Española de Organizaciones Empresariales) no quiera reunirse con ellos “porque están muy cómodos en sus sillas”.

Óscar García ha tenido unas palabras para la plantilla de Nissan y Elgorriaga, afirmando que hay quien no acude a movilizaciones como ésa por miedo pero “llevan meses sin cobrar”. También ha lanzado un mensaje a los trabajadores de Composites Avanzados de Arévalo: “pertenecer a la clase trabajadora no se elige”.

Ha calificado el estado de la ciudad en los últimos días como de “shock”, en alusión al conflicto de la planta Nissan “a la que se suma la plantilla de Elgorriaga y otros centros de trabajo”.