La empresa ha recalcado que las bajas temperaturas pueden afectar a instalaciones particulares, contadores y viviendas tanto aisladas como adosadas, especialmente en la zona rural y en los lugares de mayor cota de altura. Las incidencias suelen darse en tuberías y contadores exteriores si no están lo suficientemente aislados o si la fachada se orienta al norte.

Se recomienda:

- Si tienen tuberías particulares a la intemperie o susceptibles de congelarse, protegerlas con material aislante. Puede servir a este efecto la fibra de vidrio.

- Comprobar que el lugar donde se localiza el contador esté en buen estado. En caso de congelación, no se deben forzar las llaves de paso, sino aplicar aire caliente y aislar la sección.

- Si no se va a utilizar agua durante un periodo de tiempo prolongado, se puede cerrar la llave de paso y vaciar las tuberías, de modo que no quede agua en su interior.

Cuando haya pasado la ola de frío, Aqualia recomienda que se revisen las instalaciones interiores de agua para asegurarse de que no hay fugas. Si no la hay, comprobar que el contador no registra consumo de agua, que los grifos están cerrados y los electrodomésticos funcionan con normalidad. Si por el contrario se da la fuga de agua, se deben realizar reparaciones tan pronto como sea posible; así se evitarán más daños materiales y se ahorrará en consumo de agua. Aqualia recuerda que la instalación interior es una responsabilidad individual de cada particular.