El hecho provocó un amplio despliegue de medios de emergencia en la avenida Patrimonio de la Humanidad el martes 20, cuando se recibió un aviso de que hombre se encontraba encerrado en su domicilio y aseguró que iba a quitarse la vida si alguien entraba en la vivienda.

Varias dotaciones policiales y una ambulancia de soporte vital básico se desplazaron al lugar, donde en colaboración con el médico del Servicio de Emergencias 112 iniciaron una conversación con el ocupante de la vivienda para intentar tranquilizarle. Desde dentro del domicilio el hombre gritaba que iba a "cortarse el cuello con un cuchillo jamonero".

Desde la Comisaría de Policía se logró localizar al médico psiquiatra responsable del seguimiento de esta persona, que se desplazó al lugar para colaborar con el facultativo del 112, que inicialmente atendió el incidente, y que confirmó que se trataba de una persona con un trastorno severo que precisaba de atención permanente.

Transcurridas más de dos horas de conversaciones, los efectivos policiales requirieron la presencia de efectivos del Parque de Bomberos de Ávila, que mediante un brazo articulado de un camión escala elevaron a varios policías hasta el balcón de la vivienda, situado en un quinto piso. Allí siguieron conversando con el individuo y confirmaron que blandía un cuchillo de grandes dimensiones que mantenía pegado a su cuello.

El hecho terminó con los agentes y los bomberos fracturando una ventana. Una vez dentro del domicilio, uno de los policías logró arrebatarle el cuchillo y reducirle sin causarle daño alguno. Eso sí con ayuda de sus compañeros dado que el hombre era muy corpulento. Fue trasladado al Hospital Nuestra Señora de Sonsoles para recibir asistencia médica.