Los ediles del PSOE entienden que las luces en la calle, “además de una cuestión ornamental, animan a salir, dan vida a los espacios públicos y resulta positiva para comerciantes y hosteleros”.

Desde su punto de vista, el equipo de Gobierno ha mostrado ser “muy poco exigente” en la planificación de la campaña navideña, lo que ha dado como resultado una ambientación que “adolece de la mínima calidad que requiere una capital Patrimonio de la Humanidad”.

El PSOE echa en falta “criterios” que pongan en valor las celebraciones organizadas en la ciudad. "Es necesario, no sólo mantener la calidad de los servicios que se ofrecen a los ciudadanos en estos períodos festivos", sino que lo que llevan aparejado, como las atracciones, no tengan un impacto visual con el entorno", en referencia a las instaladas en el Mercado Grande ante la muralla.

Los socialistas creen que "no todo puede valer, más aún, si estamos hablando de un casco histórico para el que debería tenerse en cuenta una estética acorde de los elementos que se instalan".