Según IU, las quejas vienen derivadas de que la remodelación de líneas “no sólo no ha tenido en cuenta las necesidades de los ciudadanos sino que ha dejado incomunicadas zonas de la ciudad”, ya que se han realizado teniendo en cuenta las necesidades no de los ciudadanos sino “de la empresa concesionaria”.

Hace unas semanas los concejales del PSOE se hicieron eco de las quejas, pero el equipo de Gobierno contestó que sólo se habían producido nueve.

Entre las quejas recibidas, que ha trasladado al equipo de Gobierno, las procedentes de vecinos del casco histórico -personas mayores y con problemas de movilidad, en su mayoría-, que deben desplazarse “distancias excesivas” para tomar el autobús; de la zona norte, donde ha desaparecido la línea 7; o en espacios deportivos como Sancti Spiritu o el polideportivo Manuel Sánchez Granado, a cuya piscina ahora acudirán muchos usuarios, tras el cierre de la piscina de la zona sur.

“Eso sí -ha recalcado la portavoz de IU-, hasta cinco líneas permiten llegar al Centro Comercial El Bulevar”.