En su alocución semanal, el prelado abulense ha echado mano de un discurso del presidente de la Conferencia Episcopal, Ricardo Blázquez, para calificar de “inéditos” los resultados de las elecciones de diciembre, ante los que los obispos españoles “están llamados a decir una palabra sobre las especiales circunstancias políticas” que está atravesando España.

El prelado ha incidido en “algunas realidades básicas” que “garantizan mayor estabilidad y una mirada confiada al futuro”. Entre ellas, ha subrayado la importancia de “garantizar la libertad religiosa” y de una “laicidad positiva”, que implica “cooperación y neutralidad”.

Así, el presidente de la CEE aboga por mantener los acuerdos Iglesia-Estado, que “no son privilegios, sino instrumentos jurídicos de armonía con el derecho a la libertad religiosa”.

Al respecto, el obispo ha destacado el “interés” de la Iglesia por “contribuir, mediante su específica misión pastoral, al bien común” de todo el pueblo, “también en el contexto sociopolítico actual”.