Esta formación ha presentado una moción al próximo pleno de la Diputación para proponer su supresión. "El impuesto grava a los ciudadanos que cumplen con la ley" y "al final sólo sirve para recaudar", según el diputado provincial Santiago Jiménez.

Por eso quieren que la Diputación pida a la Junta para que retire el impuesto, ya que los importes cobrados "no se han empleado con el fin que se decía en la ley", cuando indica que irán a parar a "la financiación de los programas de gasto relativos a actuaciones medioambientales, en colaboración con las entidades locales".

IU detalla que entre los años 2012 y 2015 los abulenses han abonado en concepto de este impuesto más de 1.960.000 euros, mientras que este año la cifra presupuestada por este concepto es de 482.820 euros entre los consorcios de la Zona Norte y del Valle del Tiétar.

Según estos datos, de 6,62 euros por tonelada que se paga a la Junta por este impuesto sólo repercuten en el coste del tratamiento de los residuos el 15,15 por ciento, con lo cual, de "un coste real de 36,44 euros por tonelada, los ciudadanos abonan finalmente 43,06".