Fueron sorprendidos por el Seprona de la Guardia Civil el 10 de agosto en la zona de dominio público del arroyo El Horcajo, cuando llevaban a cabo una tala de árboles.

La extensión afectada es de 14.464 metros cuadrados, y se estima que hayan podido obtener un beneficio económico de más de 4.000 euros, si bien la Guardia Civil ha apuntado que "el daño ecológico es incalculable debido a la extensión de terreno afectado".

Los autores del hecho no respetaron la zona de dominio público hidráulico, y por tanto tampoco la franja de vegetación autóctona de la zona de servidumbre y policía, causando, "además de la alteración del cauce, un daño sustancial de la calidad del suelo y un grave perjuicio para el equilibrio del ecosistema del arroyo".

Los imputados son F.G.M.G., de 55 años de edad, natural y vecino de  Lanzahita, y B.G.B., de 58 años, natural y vecino de Pedro Bernardo, a los que se les considera autores de un delito de daños y de un delito contra los recursos naturales y el medio ambiente.