En este caso, la institución provincial, a petición del Ayuntamiento y ante los problemas que han aparecido con la potabilizadora del municipio, que han llevado a declarar “no apta” para el consumo el agua que llega a las casas, se han facilitado dos cisternas para el abastecimiento de la población.

La sequía, en La Adrada, ha hecho que aparezcan elementos contaminantes en el agua, una circunstancia que ya ocurrió en los años noventa, aunque los problemas de abastecimiento también han sido la causa del suministro que se ha realizado con cisternas a otras cuatro localidades abulenses: Casasola, Martiherrero, Navarredondilla y Cabañas (Riofrío).

Por lo que respecta al agua embotellada, suministrada en garrafas, se facilita en el caso de problemas endémicos de abastecimiento, como ocurre en varios municipios de La Moraña, cuya agua registra presencia de arsénico o nitratos. Son los casos de Bercial de Zapardiel, Bernuy de Zapardiel, Blascomillán, Blascosancho, Bohodón, Cabezas de Alambre, Constanzana, Escalonilla, Jaraíces, Muñosancho, Pedro Rodríguez, Salobral, San Vicente de Arévalo, Velayos, Villanueva de Gómez y Villar de Corneja.

Así, la Diputación, que subvenciona el 80 por ciento del coste del suministro a los ayuntamientos con problemas de abastecimiento, ha destinado más de 50.000 euros desde noviembre del año pasado a paliar estos problemas con el agua.