En lo que llevamos de año, los precios se han incrementado un 1,1 por ciento, mientras que la variación de precios interanual se eleva al 3,3%, el porcentaje más elevado de Castilla y León, que sitúa a Ávila como la provincia más inflacionista de la Comunidad autónoma, y la segunda de España, solo superada por Lleida.

Los grupos con mayor influencia en este aumento son transporte, debido principalmente al aumento de los precios de los carburantes y lubricantes, y vivienda, en su mayoría a causa del aumento de los precios del gasóleo para calefacción que bajaron en 2011.

También en alimentos y bebidas no alcohólicas, destacando las subidas de los precios de las frutas frescas y las  patatas y sus preparados, así como en el apartado de otros bienes y servicios, en su mayoría a causa de la subida de los precios de los otros servicios que se mantuvieron estables el pasado año. 

A pesar de la subida de la tasa anual del IPC general, cabe señalar el descenso de la tasa anual del grupo de ocio y cultura, debido al comportamiento de los precios de la  prensa y revistas, los  servicios culturales y el viaje organizado.