Construida a principios de la década de los 90, la presa tenía como finalidad garantizar el abastecimiento de agua, en verano, a las poblaciones de Solosancho, Villaviciosa, Baterna y Robledillo.

Sin embargo, una vez garantizado el abastecimiento a estos municipios en 1996 desde otros puntos, y por la “alta fisuración” del granito existente por debajo de la cimentación de la presa, se prohibió expresamente embalsar agua, según se ha explicado desde la Confederación Hidrográfica del Duero.

A esto se une que el 11 de marzo de 2008 caducó la concesión para el abastecimiento de esos municipios, que se había otorgado en 1994.

Entonces, se contempló la posibilidad de su demolición, aunque no ha sido hasta ahora cuando se ha adoptado la decisión echarla abajo, en el marco de las actuaciones en cauces contempladas en el Plan Hidrológico del Duero.

La supresión de la presa eliminará "obstáculos transversales en el cauce", porque "se encuentran fuera de uso y no cumplen función alguna ligada al aprovechamiento de las aguas", además de “impedir” la dinámica fluvial y “fragmentar” los hábitats.  

Eliminado el muro, se mejorarán el desagüe del cauce y, en consecuencia, los ecosistemas asociados al mismo.

La presa de Garganta Honda era una presa de gravedad de planta recta y 14,3 metros de altura sobre cimientos, cuya coronación tiene 115 metros y otros tres de anchura. La demolición comenzó el 22 de junio.