Son 22 escolares del Colegio Rosaryhill School, de Hong Kong, que se encuentran en Ávila durante dos semanas, muchos de ellos en compañía de sus padres. Los grupos hongkoneses son ya habituales, como los de China: 22 alumnos de Shangai se han marchado recientemente tras permanecer 36 semanas.

"Lo habitual es que permanezcan entre cuatro y seis semanas y vengan con profesores acompañantes, que en algunos casos imparten algunas clases", explica la directora del centro, Sonsoles Sánchez-Reyes.

El programa de enseñanza se ajusta a sus necesidades, así como las actividades extracurriculares, y se les ofrece "el curso que necesitan" y "una oportunidad de inmersión".

Destaca que se une a la Universidad de Salamanca como "institución señera en la enseñanza del español" con Ávila como ciudad "bien ubicada, con calidad de vida, acogedora, tranquila y segura", donde los estudiantes se alojan en familias y efectúan viajes a distintos puntos de la península o a ciudades europeas.

"Ofrecerles la enseñanza que desean es un reto para estar al nivel más alto", señala Sánchez-Reyes.

Entre los grupos nuevos este año se encuentran los de Lenoir-Rhyne University, de Carolina del Norte, de donde proceden 11 alumnos con los profesores Arturo Ortiz y Adelia Parrado. Ésta docente destaca que "la ciudad se adapta muy bien para las necesidades de un grupo", cuyos integrantes deciden qué desean aprender según sus intereses, como por ejemplo folclore, tradiciones o cine.

Los programas "flexibles" con "las necesidades educativas de nuestros alumnos" es el motivo por el que acuden estudiantes de la Illinois State University, según destaca su profesora, Montserrat Mir, como también señala Alfonso Illingworth, docente de la Eastern Michigan University, que acude por noveno año a la ciudad.