La lectura la ha abierto José Payá Bernabé, director de la Casa Museo Azorín, en Monóvar (Alicante), localidad natal del escritor, quien ha incidido en que el homenaje que se ha rendido en Ávila a José Martínez Ruiz ha sido “un acto de justicia”, porque “si hay un escritor español que haya dedicado prácticamente toda su vida a promocionar la figura de Santa Teresa ese ha sido Azorín”.

“Ávila es, entre todas las ciudades españolas, la más siglo XVI. Se la llama Ávila de los Caballeros. Su población no es crecida. Las murallas, con sus 88 torres, ciñen el caserío y forman un ámbito perfectamente cerrado. Los más bellos palacios de Ávila son del siglo XVI. El siglo XV tiene también recuerdos. Todo evoca en la ciudad a Felipe II y a los Reyes Católicos” escribía Azorín en ‘Una hora de España’.

Este fragmento, además, es el que ha iniciado la lectura pública, en la que ha participado medio centenar de personas y que se ha sumado a las dedicadas a Miguel Delibes y a Miguel de Unamuno en ediciones anteriores.

De lectura diaria
Payá Bernabé ha recordado que, desde 1898 hasta 1965, cuando publicó su último artículo, en el diario ABC, Azorín se dedicó “de forma permanente” a “reivindicar” la figura de la santa.

Y lo hizo en su libro ‘Una hora de España’ pero también promocionando la vida de Santa Teresa a través del teatro o, incluso, preocupándose por que la actriz que iba a interpretarla en el cine.

Para el director de la Casa Museo Azorín, el escritor alicantino “defendió públicamente y en privado, en todo momento y a todas horas, con República, sin República, con posguerra y sin posguerra, a Santa Teresa”, hasta el extremo de que él aseguraba que “todos los días, necesitaba leer” a la monja abulense.

En cuanto a ‘Una hora de España’, el libro que se ha recordado en la lectura, fue el discurso de ingreso de Azorín en la Real Academia Española y calificado por el Premio Nobel Mario Vargas Llosa como “un modelo de discurso”.

Tal fue así que el escritor hispanoperuano, cuando ingresó en la Real Academia “estuvo fijándose en todo momento en cómo lo había hecho Azorín, para hacerlo lo mejor posible”. La respuesta a esta intervención, además, la ofreció otro Premio Nobel, Camilo José Cela.

Actividades

Antes de la lectura se celebró el certamen de microrrelatos -entre las 10,30 y 12,30 horas en el Mercado Grande-, a la vez que los pequeños pudieron escuchar los cuentos de Maísa Marban, y en el paseo del Rastro se abrieron las casetas de la Feria del Libro, que contaron con numeroso público.

Algunos autores firmaron sus obras, como los de la Asociación Cultural de Novelistas La Sombra del Ciprés con su obra de relatos 'El mundo según los abulenses'.