El procurador Fernando Rodero atribuye esta circunstancia a los “protocolos administrativos” seguidos antes de decidirse que fuera sometido a una intervención quirúrgica, lo que llevó a trasladarle primero al Complejo Hospitalario de Ávila y luego al salmantino.

El hombre, que sufre secuelas del episodio cardíaco, se encontraba en Carpio Medianero, un anejo de Diego Álvaro, término municipal abulense limítrofe con la provincia salmantina. Carpio Medianero dista 68 kilómetros de capital abulense y 52 de Salamanca.

Rodero ha pedido que se atienda a los pacientes “mediante criterios de ordenación territorial y no en función de cuestiones burocráticas”, a la vez que ha constatado que existen zonas de la provincia que deberían ser atendidas “en los hospitales más cercanos”, como las comarcas del Tiétar, Barco de Ávila-Piedrahita y Moraña.