Y lo ha hecho en un pleno extraordinario celebrado en El Barco de Ávila el jueves, en el que se ha destacado además que la institución provincial se encuentra “a la cabeza del elenco de las instituciones que en toda España dedican su mejor hacer a la edición de la documentación histórica”.

Así lo ha dicho el presidente de la Diputación y alcalde del municipio, Agustín González, para quien “el fruto de la labor modélica” de la Duque de Alba es que la colección de Fuentes Históricas Abulenses, que se comenzó a editar en 1987, “se ha convertido en clave de referencia para su conocimiento y en una pieza irremplazable de la riqueza patrimonial” de la provincia.

“Con el fondo investigado y sacado a la luz se han transcrito miles y miles de documentos conservados en más de 25 archivos, la mayor parte de ellos inéditos”, ha recordado González, antes de significar que ha sido posible gracias a “una ingente tarea en la que han participado más de 40 investigadores”, algunos de los cuales se han dado cita en El Barco.

Historia de Ávila
De la importancia de la colección de fuentes documentales “dan fe los cinco volúmenes ya publicados de la Historia de Ávila, para cuya redacción ha sido imprescindible la información aportada por los documentos editados en dicha colección”, ha destacado.

Tampoco se ha olvidado González en su discurso de los artículos sobre historia económica, historia social, historia del derecho, filología o lexicografía que han sido publicados o están a punto de publicarse en diversas revistas de carácter científico, “que servirán para la elaboración de tesis doctorales de historia o filología, y, si cabe, de inspiración”.

“Las huellas de nuestra historia conservadas en nuestros archivos son no sólo la voz y el eco, más o menos lejano, de cosas y de personas que pasaron, sino también la siembra y el mejor aval de nuestro propio vivir, de nuestro hoy  y, por necesidad, de nuestro mañana”, ha recalcado el presidente en su discurso.

Compromso
Una intervención en la que ha resaltado además el compromiso de la Diputación por mantener “durante más de dos décadas” el proyecto cultural que representa la Institución Gran Duque de Alba, que nació “con el ambicioso propósito de acometer la catalogación, transcripción y edición de las fuentes documentales referidas a Ávila y a los pueblos de la provincia que existieran en los distintos archivos locales, provinciales y estatales”.

Una labor que, además, ha permitido poner a disposición de los investigadores los “datos, hechos, procesos y noticias de primera mano” con el fin de “conocer, analizar y explicar, sobre la base de informaciones reales, el pasado histórico y la riqueza patrimonial” abulense.

Junto a la Historia de Ávila y las Fuentes Históricas, González se ha referido también, entre el elenco de lo publicado, a varios libros escritos en Ávila o sobre tema abulense en los siglos XVI y XVII, citando como ejemplos la 'Historia de San Vicente y Grandezas de Ávila' de Bartolomé Fernández Valencia; 'Historia de la vida, invención, milagros y traslación de San Segundo, primer obispo de Ávila' de Antonio de Cianca; y 'Tratado del fallesçimiento del muy ínclito señor don Juan de Alonso Ortiz', entre otros.

Además del pleno, la celebración ha incluido un acto académico en el que han intervenido José Antonio Pascual Rodríguez, doctor en Lengua española por la Universidad de Salamanca y miembro de la Real Academia Española, donde ocupa el sillón 'k' minúscula; José Luis Martín Martín, catedrático de Historia Medieval en la Universidad de Salamanca; y Pilar Ostos Salcedo, catedrática de Ciencias y Técnicas Historiográficas en la Universidad de Sevilla.

En la clausura del acto, el presidente de la Institución Gran Duque de Alba, Carmelo Luis López, ha significado la “honda satisfacción” que produce “valorar y agradecer, en el cuerpo impreso y vivo de las obras presentadas, el resultado de las muchas horas de respetuoso estudio que sus autores han dedicado al legado de nuestros antepasados”.