Fernando Isaac Gómez, natural de Paraguay, cumple 27 años el sábado y está a punto de tener un hijo: salió el viernes del Complejo Hospitalario de Salamanca después de haber ingresado el 15 de septiembre.

En la rueda de prensa celebrada en el centro sanitario salmantino, ha explicado que vive en España desde hace cuatro años pero que se encontraba enfermo desde 2005.

Tenía muy extendido el tumor por la frente y las órbitas de los ojos, lo que le producía dolores en los ojos y en la cabeza, y la hinchazón del tumor apenas le dejaba ver. Ahora, con dos grandes cicatrices en la cabeza, podrá hacer vida normal. Tiene que recurrir a las gafas de sol porque la luz le molesta.

Han sido ocho servicios del Complejo Hospitalario de Salamanca los que se han coordinado para afrontar la intervención, que por vez primera han llevado a cabo con estas características, según los doctores Jorge García y Juan Antonio Gómez-Moreta.

Eso sí, han tenido que esperar medio año, hasta que la Organización Mundial de Trasplantes (OMT) les dio el visto bueno a extraer la mitad del cráneo y parte de los huesos de la cara.

El paciente sufría una "gran deformidad craneofacial con afectación visual y desplazamiento de globos oculares por la lesión con tumoraciones muy graves y visibles que afectaban al hueso y a tejidos blandos", ante lo que llevaron "una cirugía por una tumoración que afectaba a las órbitas, base craneal anterior y hueso frontal completo".

Hace dos años ya le habían hecho una primera intervención para extirparle el tumor intracraneal y reconstruir la cubierta cerebral.

Los facultativos han aclarado que no es un trasplante facial, "es algo diferente", ya que estos se llevan a cabo, por ejemplo, por quemaduras. Este caso es, "médicamente más complejo, pero técnicamente menos que un trasplante de cara".